Fotografía Editorial para la revista Hola.com
Muchas personas están familiarizadas con los integrantes de la farándula de su país: quiénes son, qué hacen, cómo visten, con quién están casados, y un sinfín de detalles más. Si realizas una búsqueda en Google del nombre de alguna de estas personalidades, te bombardearán con información como su estatura, cuántos hijos tienen, entre otros datos que solo interesan a sus fanáticos y a quienes disfrutan del cotilleo.
Sin embargo, nuestro enfoque y trabajo se centran en un tipo diferente de -cotilleo-, aunque bajo el mismo paraguas y eso lo tenemos clarísimo. Con nosotros todo el mundo sale bien.
Cuando somos convocados para trabajar en un editorial de este estilo, nos enfrentamos a lo que podríamos llamar «estudio social farandulero». Aunque pueda parecer un terreno desconocido para algunos, para nosotros no lo es en absoluto, ya que hemos estado inmersos en este medio durante casi 30 años. Nosotros estamos en la plaza de toros pero observando desde la barrera, involucrados en el ambiente pero sin estar en la arena misma. Este es el trabajo de los fotógrafos editoriales, y cuando te dedicas a esta área, es necesario sumergirse profundamente en el proceso. De hecho, en ocasiones llegamos a encargarnos de toda la preproducción, algo en lo que tenemos una vasta experiencia después de haber realizado editoriales durante más de 20 años.